Víctor Álvarez R.
Balance
2021: primer año sin contracción ni hiperinflación
Entre 2014-2021, el
tamaño de la economía venezolana se redujo 80 %. Es como si una persona que
pesaba 100 kilos la vemos 7 años después y apenas pesa 20 kilos. Eso fue lo que
pasó con el PIB venezolano, quedó en el hueso al perder su masa muscular de
inversionistas que se fueron, empresas que quebraron, obras interrumpidas,
deterioro de la infraestructura y colapso de los servicios públicos.
Finalmente, en 2021 se
detuvo esta prolongada contracción y también concluyó la espiral
hiperinflacionaria que comenzó en noviembre de 2017. Por primera vez desde
2013, los indicadores económicos registran un resultado positivo. El PIB del
sector privado -que representa el 60 % de la economía- creció 3 %, mientras que
el Sector Público -el 40 % restante- se redujo 5 %. Datos del Observatorio
Venezolano de Finanzas registran un avance de 9,2 % en el tercer trimestre de
2021.
Cambio
de políticas
La apertura del mercado interno a toda clase de importaciones sin arancel, el levantamiento y abandono de los controles de cambio y de precios, la desregulación y liberalización de la economía, la dolarización transaccional, la privatización de la gestión de empresas públicas, la promoción de exportaciones, la apertura a la inversión extranjera, la recuperación de la extracción de petróleo y el repunte en los precios de los crudos, son los factores que explican la recuperación económica. Este abandono del modelo nacionalista, estatista y controlador ha sido forzado por el colapso de la renta petrolera, el endurecimiento de las sanciones y el impacto económico del Covid.